Todos los animales son seres vivos extraordinarios, aprendemos de ellos, tanto que muchas de las tecnologías modernas nacieron por tratar de copiar a algunos de ellos.

Es cierto que algunos de ellos son peligrosos y no podemos convivir cerca de ellos, otros nos sirven de alimento, existen los que son invasores no deseados, hasta hay los que nos entretienen voluntariamente pues sienten una atracción hacia nosotros (los seres humanos).

La forma como los tratamos, dice mucho de nosotros, revela realmente quienes somos nosotros, sobre todo cuando nos referimos a los animales domésticos, recordemos que los animales domésticos son seres dependientes, requieren de nuestra atención, necesitan que se les cuide y cubra sus necesidades básicas (comida y techo), ellos no nos eligieron, si tienes una mascota en casa es porque un ser humano lo ha traído y ahora es parte de la familia.

Cada vez como que se hace costumbre deshacerse de una mascota , algunas razones: aburrimiento, no tengo tiempo; el problema no es si ya no queremos tener el animalito en casa, resulta que la mayoría de la veces la mascota es sacada del hogar dejándolo en condición de calle, vulnerables, asustados, con su vida en riesgo y sin saber si se volverá un riesgos para otras personas.

¿Qué pasa por la mente de alguien al botar una mascota? ni idea, no lo comprenderé jamás, he tenido la dicha de crecer en un ambiente donde los animales se cuidan y protegen, se les da cariño y se les quiere hasta el punto de formar parte de la familia, hasta cuando mueren lloramos y extrañamos su ausencia.

Tener una mascota es un pacto con la vida, un compromiso, quienes botan a un animal revelan que no tienen la capacidad de mantener una promesa, indica que no les importa romper un acuerdo, por lo tanto, no son personas confiables.

Cuidar de un animalito, darle atención durante su vida, demuestra que la persona tiene una capacidad de amar inmensa, un amor que no espera nada a cambio.

Es cierto, las circunstancias cambian, nos enfermamos, crisis económica, mudanzas, entre otras razones pueden obligar a alguien a plantearse entregar su mascota, sin embargo, ninguna circunstancia ajena a nuestra voluntad justifica que los abandonemos y tiremos a la calle.

Si por algún motivo ya no puedes tener tu perrito o gatito, recuerda que en la mayoría de las ciudades hay casas de refugios de animales, hay personas que están buscando mascotas, quizás un amigo o vecino quiera y pueda ayudarte mientras superes el problema.

Amigos, es en serio, no es una opción, las mascotas dependen de nosotros no los abandonemos...

Si no tienes mascotas, pero igual te preocupa esta problemática, puedes informarte sobre alguna organización sin fines de lucro que esté en tu ciudad, para que les des apoyo y soporte...