Como una hermosa perla, mi alma es libre
“Las perlas son muy hermosas, pero son fruto del dolor. Toda perla es consecuencia de una ostra que ha sido herida por un grano de arena que entró en su interior. Una ostra que no ha sido herida, no puede producir perlas”₁
Louise accionó el botón que comunica con el bar de primera clase, en minutos breves apareció una camarera bastante agraciada y dispuesta a servir. Pidió un vino tinto cabernet, revisó su teléfono y vio que aún lo conservaba en su galería de fotos; este señorita, lo tienen en inventario? Déjame revisar; la camarera observó en su tableta y dijo: sí señora; lo quiere acompañar con una tabla de quesos curados y aceitunas negras? Está bien, pero a él no le recibe ni un dólar, por favor!
Él sonrió diciendo: porque conservas esa foto?
Sabes, respondió ella: con esa botella de vino sellamos nuestro primer encuentro; semanas atrás luego que nos conocimos y acordamos ir a bailar, me debatí emocionalmente en un mar de noches; lloré y supliqué, si era justo conmigo misma romper mi juramento de no mirar a ningún otro hombre con los ojos del amor, luego de mi doloroso divorcio. Cuando pediste la botella aquella tarde, guarde silencio; algo dentro me decía que no fuera a salir corriendo; entonces capture el ambiente de la mesa, para luego reflexionar del porque no me resistí. Aquella vez, fui a disculparme, a decirte que no quería ni tu amistad. Pero, cuando me invitaste a bailar aquel violín -como tú dices- quedé atrapada cuál grano de arena en una ostra; ha sido muy doloroso el proceso de enamoramiento contigo. Pero, hace minutos atrás me dijiste que nuestra próxima salida, sería a un crucero por el caribe; mi corazón saltó diciéndome: ese malestar es ahora una bella perla; por qué has mostrado que ambos nos complementamos. A propósito, porque tardaste una eternidad para decirme que tu piel si desea sentir la mía?
Sabes querida; en días pasados cuando logré reorganizar mi comunicación telefónica, y retomamos nuestros diálogos diarios, estábamos alejados a 10 horas en tren; tú no dudaste ni un minuto en salir corriendo a donde yo estaba. Esa señal empezó a comprometerme sentimentalmente contigo; tomaste acción, tal y como enseña la orden del amor; ella dice: Pon acción y haz lo necesario para que la copulación de la creación suceda.₁” Eso también es liberar el alma, porque deseas darle otra oportunidad a tu vida; quizás no conscientemente, pero tu alma la necesita. Luego cada tarde cuando te enojabas porque te abandonaba en el hotel, yo esperaba ver si tomabas un avión y me tirabas a la basura emocional; pero, observé que en el doloroso proceso para ambos; -porque yo si quiero amanecer siendo uno contigo- estabas ejerciendo autocontrol emocional, necesario para coser tu corazón y para crear una nuevo ser.
-Y prosiguió- amor, me gusta cómo te comparaste con una perla; de dónde surgió esa analogía?
Louise busco su libreta de frases; (antes acostumbraba a llevarlas en pedazos de hojas sueltas en cada bolso) pero Mirtha le sugirió que las ordenara en una libreta manual; así también ordenaría de a poco sus pensamientos y su vida también; aquella vez, la terapeuta le dijo: James Allen escribió: “Así como piensa ordenadamente, así es la vida del pensador”, la puso en manos de su enamorado; él leyó: “Las perlas son muy hermosas, pero son fruto del dolor. Toda perla es consecuencia de una ostra que ha sido herida por un grano de arena que entró en su interior. Una ostra que no ha sido herida, no puede producir perlas”₁
Entonces lo abrazó ahogada en lágrimas, y dijo: Estoy lista para reunir a mis hijos y, a mi ex, para coser las heridas que les cause; Será en un par de semanas. En pocos días me reuniré con Mirtha para que me ayude a armarme de valor y serenidad.
Está bien; -añadió él, contagiado por las lágrimas de Louise- sabes: he pedido durante años a los cielos una compañera de vida, que guste de las letras, de la música y de la bohemia. Cuando amanecimos bailando en el remolque el sábado, mi voz interior me alertó que ese deseo contigo se estaba cumpliendo. Un silencioso abrazo los inundó de lágrimas, cuál torrente de lluvia fresca.
Louise volvió a observar el teléfono; uhy..! Tengo un mundo de mensajes de mamá, de Mirtha, de mis hijos. Pero pidió que le deletreara el título del violín. Él sin pensarlo dijo “Guarda la esperanza”₂
No me engañes, esa no es -defendió Louise-
Escuchemosla, bailémosla, ese ha sido mi himno en nuestro proceso.
Con una condición, que luego bailamos el violín. -intervino Louise-
Él, con un suave beso dijo: ¡Trato hecho! Pero relájate y contesta los mensajes, diles que falta menos de dos horas para llegar.
Una vez Louise estuvo en sus brazos, él dijo: la bella melodía dice: “Guarda la esperanza hasta el final, hasta la victoria”₂ etc.
Bailaron las dos músicas alternativamente; pronto se bebieron la botella; ambos se sumergieron en un sentir lleno de lágrimas. Ella confesó que hasta hace poco pensaba que él no la deseaba; él sin embargo, dijo que aún se debatía, si apostar por ese amor era correcto. Pero, el brasileño Coelho dice que el hacedor necesita dar un salto de locura... Aquí estamos unidos en una sola bandera...
El altavoz anunció la llegada al destino final de los enamorados. Louise no paraba de llorar, diciendo: ¡no es justo! porque lo último que él dijo, fue: te felicito, termina el proceso con Mirtha, ve cierra círculos y heridas pasadas; nos encontraremos en el aeropuerto cuando esos dos pasos estén finalizados. Luego de un silencioso beso, ella abordó el auto de uno de sus hijos que la esperaba para llevarla a casa. El joven miró detenidamente al amigo de su madre, él a su vez también fijó su mirada en el muchacho; ambos movieron levemente la cabeza en señal de saludo y amistad.
El auto se alejó de la estación del ferrocarril. El joven en silencio respetó el llanto de su madre; la abuela se hizo presente con una llamada, -madre habla con ella, no debo distraerme- Louise entre sollozos le comentó a su mamá algunos detalles de los acuerdos con su amigo. El joven no tuvo necesidad de hacer ninguna pregunta, todo el asunto del romance de su madre le quedo claro.
Una vez terminó la llamada abrió al azar la libreta de frases, leyó silenciosamente:
“La vida y sus caminos, son como un rompecabezas. Cada pieza tiene un lugar, un momento, un porqué. No insistamos en colocar partes donde aún no encajan”₃
Madre: estás de acuerdo en ir a comer algo antes de ir a casa?
Está bien cariño, vamos a donde desees!
Notas:
-1- Psicoactiva.com-
-2- Guarda la esperanza, hasta el final hasta la victoria; ama la vida y veras
Que te lo agradecerá. Cuando nada te va, hacer favor; pídele ayuda, sin más temor,
Al sol que se levanta, levantará calor y luz a tu vida, guarda la esperanza...etc. -French Latino-
-3- -Psicoactiva.com-
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